Sala cuna I

Sala cuna I 

Señor Director: 

Se ha dicho que contar con Sala Cuna Universal es un imperativo social. “Una necesidad del país” declara el editorial de ayer en La Segunda. Se añade que el proyecto de acceso al derecho a sala cuna permitiría generar más de 15 mil nuevos empleos para las mujeres. De paso crecería el PIB. 

Hasta ahí todo bien. Sin embargo, es sorprendente que en todo el debate se omita mencionar a los otros protagonistas: las niñas y niños que podrían asistir a los establecimientos, especialmente los más vulnerables. Ese acceso puede entregar grandes beneficios para la numerosa población infantil marginada, al tener buenos programas formales de estímulo de sus habilidades cognitivas, lingüísticas y emocionales. 

Que se tenga claro. No da lo mismo una sala cuna como mera guardería, que otra con experiencias tempranas de interacción, juego y estimulación cognitiva. Concordar un adecuado cofinanciamiento público-privado es condición necesaria, pero insuficiente, si no se acompaña con estándares mínimos de calidad de las nuevas salas cuna.