6 de noviembre del 2024
En el mercado se prevé que la victoria de Donald Trump por la presidencia de Estados Unidos tendrá consecuencias económicas que se harán sentir en todo el mundo, de manera profunda e inmediata. Y Chile no estaría exento de dicho impacto.
Donald Trump reconquistó la Casa Blanca este miércoles tras conseguir más de los 270 votos del Colegio Electoral necesarios para ganar la presidencia de Estados Unidos. En ese sentido, diversos agentes prevén que su victoria tendrá consecuencias económicas para el resto del mundo, que probablemente serán profundas y bastante inmediatas, y Chile no estaría exento de dicho impacto.
Su Partido Republicano también logró el control del Senado e incluso podría ganar la Cámara de Representantes, lo que facilitaría al presidente legislar su propuestas e impulsar nombramientos clave.
Hermann González, coordinador Macro de Clapes UC y socio de Valtin Consulting, plantea que “en general, no son buenas noticias, excepto para empresas que están en Estados Unidos y que se podrían beneficiar de la baja de impuestos corporativo, y para los inversionistas que tienen capital puesto allá, incluyendo las AFP, que se beneficiarán del alza en la bolsa americana”.
En ese sentido, el economista apuntó que “el principal tema de interés para Chile debe ser la política comercial que implemente el nuevo gobierno de EE.UU. Si se concreta el alza de aranceles que se propuso y se impacta negativamente el comercio global de bienes y servicios, es muy negativo para nuestro país. Si el foco de las medidas se pone sobre China es peor, porque se trata de nuestro principal socio comercial”.
“Otro efecto importante es lo que pueda ocurrir sobre el dólar y las tasas de interés. La elección de Trump tiene efectos alcistas en las tasas de interés y en el valor del dólar. Esto genera condiciones financieras más restrictivas para Chile y dificulta tanto la tarea del Banco Central, como para el país, porque tasas de interés más altas son negativas para el crecimiento económico que ya es muy débil, como todos sabemos”, añadió González.
Por su parte, Rafael Weber, analista de estudios de Capitaria, comentó que “con el retorno de Donald Trump al poder, existe preocupación de que se retomen o intensifiquen las políticas arancelarias contra China, lo que podría llevar a una nueva disminución en la demanda de cobre y una caída en su precio. Esto afectaría los ingresos fiscales de Chile, ya que el cobre representa una parte significativa de sus exportaciones. Además, una disminución en el precio del cobre podría influir en la inversión extranjera en el sector minero chileno, afectando el crecimiento económico y el empleo en el país”.
A juicio de Weber, el reciente triunfo de Trump en la potencia norteamericana “ha generado inquietud en la economía chilena”, y recordó que durante su administración previa llevó adelante “la imposición de aranceles a productos chinos, y las represalias de China llevaron a una disminución en la demanda de cobre, lo que resultó en una caída de su precio. Esta situación impactó negativamente los ingresos por exportaciones de Chile y afectó su balanza comercial”.
Es más, Weber destacó que según un análisis de la Biblioteca del Congreso Nacional, la guerra comercial entre Estados Unidos y China tuvo repercusiones significativas en la economía chilena, incluyendo fluctuaciones en el precio del cobre en el dólar.
Para el académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Alberto Hurtado, Rodrigo Ortiz, “considerando que Chile es un país exportador no es una buena noticia el resultado en favor de Donald Trump. Evidencia de esto es que el precio del cobre disminuyó, pues se espera que una guerra comercial entre China y EE.UU. impacte en el crecimiento de ambos países”.
“Mi evaluación es que Chile debe abordar con cautela la dependencia excesiva de las exportaciones y con esto brindar alternativas para poder crecer, que permita ser menos dependiente de los bienes exportados. Esto es una oportunidad”, añadió.
Mientras que Sergio Lehmann, economista jefe de BCI, declaró que “el efecto sobre nuestra economía dependerá, naturalmente, de lo que implemente en definitiva de su programa. Por lo pronto, las bajas de impuestos que ha anunciado tendrían un impacto en el corto plazo, llevando a mayor actividad e inflación. Sin embargo, conlleva mayores presiones sobre las cuentas públicas, lo que ha conducido a alzas en las tasas de interés a mediano y largo plazo especialmente. Algo de esto se trasladaría a nuestra economía, dada la correlación que allí se reconoce”.
“Los mayores aranceles que ha prometido, por otro lado, junto con una relación más tensa con China, llevaría a que el comercio internacional se vea negativamente afectado. Esto ha derivado en lo inmediato a caídas en el precio del cobre y otros commodities. Veríamos en, consecuencia, un menor impulso externo. Habrá que ver cuánto de lo que ha planteado implementaría el nuevo gobierno de Trump”, acotó Lehmann.
Fuente: The Clinic