Desempleo “crónico” refleja debilidad de economía y alta informalidad

Desempleo “crónico” refleja debilidad de economía y alta informalidad

En una situación de estancamiento se encuentra el mercado laboral, con un desempleo que expertos califican de “crónico” ante su alta persistencia y que irremediablemente heredará el gobierno electo de José Antonio Kast.

Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadísticas, la tasa de desocupación llegó a 8,4% entre septiembre y noviembre, con lo que completó 35 trimestres móviles consecutivos por encima del 8%, muy por debajo del rango de 6,5% a 7,5% previo al estallido.

“Se trata de un desempleo crónico que no puede constituirse en normalidad”, remarca David Bravo, director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales UC.

“El discurso de una economía ‘normalizada’ no es coherente con una tasa de ocupación baja que no ha recuperado la situación prepandemia y que tiene niveles tan bajos como los que había en Chile en 2010”, agregó el académico.

La desocupación femenina se situó en 8,8% a noviembre, al igual que el trimestre previo, mientras que el desempleo masculino disminuyó a 8,1%.

Junto con remarcar que “las cifras muestran un deterioro en materia laboral respecto a los meses previos”, el economista y director del Ocec-UDP, Juan Bravo, apunta a que la tasa general sube en 2 décimas frente al año anterior, con lo que se rompe una racha de tres meses con disminución.

Para el economista Gustavo Díaz, del Instituto Libertad, el principal problema no es una destrucción significativa de empleo, sino que la creación de puestos de trabajo (1,2% anual) sigue siendo insuficiente para absorber el crecimiento de la fuerza de trabajo (1,5%), “lo que consolida el desempleo en el rango 8% a 9%”.

Creación de empleos

En términos interanuales, se crearon 116 mil empleos, lo que representa una desaceleración frente a los trimestres previos. Es, además, la menor cifra para un trimestre septiembre-noviembre desde 2010 (excluyendo 2020).

“Preocupa la ralentización de la creación neta de empleo durante los últimos meses (...), ello parece coherente con la persistente baja demanda por trabajo, al tiempo que registros administrativos revelan un repunte relevante en la destrucción de empleo”, apunta Andrés Pérez, economista jefe para América Latina del banco Itaú.

Con ajuste estacional, según los datos del INE, se destruyeron 15 mil puestos. Se mantiene un promedio de apenas 10 mil empleos mensuales creados en lo que va de 2025, “lo que da cuenta de un mercado laboral prácticamente estancado”, enfatiza Carmen Cifuentes, investigadora de CLAPES UC.

El trimestre móvil terminado en noviembre siempre se ha caracterizado por tener la mayor creación mensual de empleo del año, recuerda Felipe Ramírez, economista jefe de Coopeuch. “Esta vez no fue así, con ocupados desestacionalizados retrocediendo. Más aún, al menos desde el año 2011, nunca había pasado que los asalariados privados caen mensualmente en este trimestre móvil”.

Informalidad repunta

Aunque la tasa de ocupación informal disminuyó 0,3 puntos porcentuales, hasta un 26,6% en 12 meses, igual se trata del mayor registro trimestral móvil en un año, dejando en evidencia una recuperación laboral débil y de baja calidad.

En ese contexto, la creación de empleo fue liderada por los asalariados del sector privado. Sin embargo, el empleo asalariado privado formal registró una variación interanual nula, mientras que el empleo asalariado informal creció 8,3% (+73 mil puestos).

“El 96,9% de la creación anual de empleo asalariado en el sector privado fue informal, es decir, empleo bajo subordinación donde el empleador no está pagando las cotizaciones de salud o pensión”, observa Bravo, del Ocec-UDP.

Apenas se crearon 2.335 empleos asalariados formales en el sector privado.

“Esto evidencia que la expansión del empleo privado se sustentó principalmente en la informalidad. Así, el desempeño del mercado laboral sigue marcado por un bajo dinamismo estructural”, enfatiza Cifuentes.

Al interior de la informalidad preocupa la recomposición hacia el asalariado informal, reflejando presiones en la calidad del empleo, complementa Bernardita Silva, gerente de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio.

En tanto, la desocupación de larga duración alcanzó a 16,8%, su nivel más alto desde fines de 2022.

"El mercado laboral continúa mostrando un debilitamiento persistente, caracterizado por una baja capacidad de generación de empleo, especialmente formal". Carmen Cifuentes, investigadora de CLAPES UC.