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Fraude y desigualdad en las pensiones de Gendarmería

11 de julio del 2016


Las señoras Olate y Espinoza ocuparon el mismo cargo en Gendarmería, pero reciben pensiones diferentes: $5,2 millones y $1,7 millones. La segunda solicitud alcanzó a ser revisada por el nuevo Contralor y la otra no. La solución ética fue expuesta por Camilo Escalona: que Olate solicite un recálculo a la propia Dirección de Previsión, Dipreca, y a la Contraloría General de la República. Escalona representa a la antigua Concertación, la de la democracia de los acuerdo, que existió hasta 2009. Hubo otras respuestas frente a este fraude: los actuales diputados del Partido Socialista y los sindicatos de Gendarmería pidieron consolidad el fraude, es decir, pagar $5,2 millones al mes a la esposa del presidente del Partido Socialista. Queda un mensaje claro para los ciudadanos: votar por la reelección de los actuales diputados del Partido Socialista (PS) en 2017, y sus alcaldes aliados ahora en 2016, es defender la pensión fraudulenta de Olate. Detrás de este fraude hay mala gestión. ¿Por qué el director de Dipreca no ha creado, o no ha aplicado, un sistema de detección de fraudes, en línea con Contraloría? Ya que fue seleccionado por el Sistema de Alta Dirección Pública, ¿merece este director la "asignación de Alta Dirección Pública" del año 2016? ¿Merece el sueldo de $4,4 millones al mes? Eso no es entendido por el "Movimiento Social". Frente al fraude de Olate, Giorgio Jackson se enfoca en la diferencia entre las pensiones de los gendarmes y las pensiones de altos funcionarios como Espinoza. La realidad es otra: las pensiones para aquellos funcionarios que cumplen 20 años de servicio no son por vejez, sino remuneraciones diferidas sujetas a una condición: permanecer 20 años en Gendarmería. Recibe cero quien es despedido o renuncia antes. este sistema, usado en todo el mundo, permite al empleador crear un incentivo fuerte al cumplimiento del deber en condiciones de alto riesgo físico (gendarmes) y recuperar el costo de entrenar civiles como la sra. Espinoza, cuya especialización tiene valor en empleos privados. Se protege así frente a renuncias fáciles frente a cualquier discrepancia. Jackson yerra al tratar estas pensiones como si fueran subsidios o regalos, ámbito donde se justifica la igualdad e incluso la focalización de montos hacia los más vulnerables. Ese diputado no sabe como funciona una sociedad moderna.
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Pensiones
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Salvador Valdés

Ing. Civil UC. Ph.D. en Economía MIT.
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